Materiales para cerramientos

Los cerramientos suponen uno de los avances más importantes para lograr una buen eficiencia energética, tanto en edificios privados como públicos. Se trata de estructuras que han de resistir las condiciones meteorológicas, así como aislar completamente el interior de la casa del viento, el frío, el calor, la lluvia, la humedad...

Los cerramientos deben permitir al usuario obtener un espacio cómodo donde desenvolverse. En muchos casos, estas estructuras están pensadas para conseguir más espacio en el interior de las viviendas. En este post nos referiremos a los materiales para cerramientos que mejor se adecuarán a cada espacio.

El aluminio es uno de los materiales favoritos para realizar cerramientos. Se trata de una posibilidades más económicas. La relación calidad precio es una de las ventajas del aluminio para cerramientos. En este caso, el aluminio debe tener rotura del puente térmico, lo que servirá como aislante contra el viento, el frío, la humedad...

El PVC es otra de las estrellas en cuanto a cerramientos. También llamado policloruro de vinilo, es un material que resiste la abrasión y los impactos, algo fundamental para obtener estructuras fiables. Dada su resistencia se convierte en ideal para la realización de todo tipo de cerramientos.

El vidrio es otro de los materiales específicos para cerramientos. En su variante de cristal templado, sirve para aislar todo tipo de salidas de unifamiliares, pisos, etc. Existe una posibilidad que además de fiable en cuanto al aislamiento, resulta particularmente estética; es el caso de las cortinas de cristal o cerramientos sin perfiles.

Otro de los materiales idóneos para efectuar un cerramiento, es el policarbonato. Los techos de policarbonato son una vertiente de los de cristal. Tienen en común con ellos el mecanismo de apertura; en este caso, se trata de un material formado por placas alveolares que proporcionan una gran durabilidad ante cualquier clase de fenómeno meteorológico.